¡Al agua patos! El chaleco flotador de Saro es el compañero ideal para aprender a nadar de forma segura y cómoda. Con 8 compartimentos y 3 piezas de flotación en cada uno, este chaleco permite ajustar gradualmente la flotabilidad mientras tu pequeño se familiariza con el agua. Ajustable con una cinta de doble cierre de seguridad y protección de neopreno para mayor confort.
Disponible en Varias Tallas
¡Al agua patos! El chaleco flotador de Saro es el complemento perfecto para aprender a nadar de manera cómoda y segura. Con 8 compartimentos y 3 piezas de flotación en cada uno, este chaleco permite retirar gradualmente las piezas a medida que tu pequeño mejora su capacidad de flotar sin ayuda. La cinta ajustable con doble cierre de seguridad y protección de neopreno garantiza que el chaleco se mantenga en su sitio mientras tu pequeño disfruta del agua.
Características Destacadas:
Instrucciones Importantes:
Además de proporcionar seguridad en el agua, el chaleco flotador Saro está diseñado pensando en la comodidad y el bienestar del niño. Su tejido suave y ligero permite una experiencia de uso agradable, mientras que la protección UV50+ protege la piel de los rayos nocivos del sol.
Es importante recordar que el chaleco flotador Saro es un dispositivo de ayuda a la flotación y no reemplaza la supervisión de un adulto en el agua. Siempre asegúrate de que haya un adulto responsable presente mientras tu hijo esté disfrutando del agua.
¡Prepárate para momentos de diversión acuática segura con el Chaleco Flotador Saro!
Chaleco flotador
El chaleco está genial porque puedes ir regulando según el peso del niño la espuma que necesita. Quizá sería útil que en las instrucciones indicará una pequeña recomendación del peso que espuma quitar o poner a modo orientativo.
Una maravilla
Me alivio ver q tenian para mi hijo de 20 meses, ya que todos los que veía eran a partir de 19 kg, aunque después de pedirlo, vi que habían más modelos. Me puse en contacto y me lo cambiaron. Hice el pedido una tarde y al medio día del día siguiente ya lo tenía. El primer día fue un poco caos, por que tragaba agua pero al día siguiente era un experto. El truco es que muevan las piernas. Si que se roza un poco de tanto moverse, pero es una maravilla poder bañarte con el peque y que no esté gritando todo el tiempo por que quiere estar solo. Siempre vigilado y nosotros de cerca pero los baños ahora son más amenos y el súper feliz.